La minería de Durango ha experimentado una notable disminución en los riesgos de accidentes laborales, un logro atribuido a la progresiva incorporación de tecnología de punta y sistemas digitales en sus procesos operativos. Este avance optimiza la seguridad en el trabajo, fortalece la protección de los trabajadores y las comunidades adyacentes a las zonas de operación.
La Asociación de Ingenieros de Minas, Metalurgistas y Geólogos de México (AIMMGM) ha reconocido que, si bien la actividad minera conlleva riesgos inherentes, estos pueden ser gestionados y mitigados eficazmente mediante la implementación de programas de capacitación continua y la adopción de herramientas tecnológicas avanzadas. En la actualidad, un número creciente de operaciones mineras se ejecutan de manera autónoma o a través de sistemas de control remoto, lo que reduce la exposición directa de los trabajadores a entornos potencialmente peligrosos.
El impacto socioeconómico de la minería de Durango
Es fundamental destacar el impacto socioeconómico positivo que genera el empleo en el sector minero, incidiendo directamente en el bienestar de las familias de los trabajadores, quienes son considerados un activo primordial por las empresas minero-metalúrgicas. Y es que, a nivel nacional, la minería mexicana da empleo a aproximadamente 417 mil personas, de las cuales 74 mil 529 son mujeres, cerca del 18 por ciento de la fuerza laboral del sector.
En Durango, el sector minero registra un total de 22 mil 341 trabajadores directos, incluyendo a más de 2 mil 100 mujeres, lo que constituye aproximadamente el 10 por ciento de la plantilla laboral minera en la entidad. Se estima que la actividad minera en el estado genera entre 40 y 50 mil empleos indirectos, un motor económico significativo para la región.
La seguridad y la salud ocupacional se han erigido como pilares fundamentales en la creación de empleo dentro de la industria minera. En este contexto, la promoción de una cultura de prevención se ha establecido como un eje estratégico prioritario. Gracias a la implementación de estas medidas, se ha observado una disminución sustancial en la tasa de incidentes laborales.
Datos proporcionados por la Cámara Minera de México (Camimex) revelan que, en 2023, las empresas afiliadas reportaron una tasa de incidencia de 1.33 accidentes por cada 100 trabajadores. En contraste, cifras del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) indican que la tasa media nacional de accidentes laborales fue de 1.83. Al comparar estos datos, se evidencia que la minería afiliada a Camimex se sitúa por debajo del promedio nacional y de al menos 14 sectores productivos. Los sectores con mayores índices de accidentes durante el mismo periodo fueron los servicios de alojamiento temporal (3.78) y los de alimentos y bebidas (3.09).
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En el mismo año, la Camimex informó una inversión de 6 mil 63 millones de pesos destinados a programas de seguridad y salud ocupacional. Esta inversión abarcó la adquisición de equipos de protección personal de alta calidad, la implementación de sistemas de ventilación avanzados para minas subterráneas y otros rubros esenciales para salvaguardar la integridad del personal.
La minería de Durango ha demostrado un avance significativo en la reducción de riesgos laborales a través de la adopción de tecnologías innovadoras y la implementación de estrategias de prevención efectivas. La inversión sustancial en seguridad y salud ocupacional, junto con un enfoque en la capacitación y la protección de los trabajadores, ha posicionado la minería de Durango por debajo de la media nacional en cuanto a la tasa de incidentes laborales, consolidándose como un ámbito laboral donde la seguridad es una prioridad fundamental.
La minería de Durango continúa su compromiso con la mejora continua de sus estándares de seguridad y salud en el trabajo.